jueves, 10 de enero de 2008

Tonterías que se dicen: "Defensa del CD"


Cuando estaba en el cole había un ritual que se repetía cada año con cada cambio de hora, alguna de las monjitas que cuidaban de mi enseñanza amablemente me solicitaba ayuda para poner en hora los relojes digitales de toda la congregación. No es que las monjitas que me cuidaron, enseñaron e incluso mimaron fueran gurús tecnológicos precisamente, pero eran listas como para dejarse asesorar y ayudar al respecto.
Hay gente que es más atrevida que mis monjitas y que sin tener ni idea opina e incluso se cree que argumenta. Diego A. Manrique escribió un alegato en defensa del CD y en contra de propagandistas de paraísos digitales, poco conocimiento tiene, tenga la edad que tenga. Para más INRI lo hace a raíz de un artículo en el que se señala que el grupo Radiohead habiendo ofrecido su último disco tanto vía Internet por la voluntad como vía clásica mediante CD resulta que en menos de un mes consiguieron 1,5 millones de descargas (la mitad pagó algo) por 45.000 CDs vendidos en una semana. Con estos datos Manrique dice:
"Primero, el sonido de un CD es superior al que se consigue bajando música desde la Red. Segundo, resulta más atractivo un CD -y no hablemos de un elepé- con su cuidado envoltorio que un disco casero o un MP3. Tercero, si todo el mundo se ha descargado In rainbows, la señal de distinción, la marca del verdadero fan, consiste en poseer la edición oficial (y más si tiene material extra). Cuarto, grandes masas de seres humanos tienen fobia a la tecnología y prefieren comprar discos de fábrica en tiendas. Los ciberprofetas, y demás propagandistas de paraísos digitales, siguen ignorando el mundo real y sus habitantes."
El primer argumento es una imbecilidad porque cualquiera que tenga dos dedos de frente se dará cuenta que la calidad del sonido dependerá del formato digital y no del demoniaco hecho de estar en la red.
El segundo es una tontería porque ya hay toda una generación crecidita que no le ve la gracia a acumular cajitas de plástico con un círculo dentro. A nivel empresarial sólo hay que plantearse el éxito de los Ipod y la subida de precio de cada acción de Apple.
Lo tercero es la perogrullada del coleccionista, sí, a mi también me regalan fetiches por mi profunda afición, pero no son excusa para la defensa de un soporte o un modelo de negocio.
El cuarto olvida que grandes masas de seres humanos lo que tienen fobia es a pagar en exceso por un objeto sobrevalorado y cuyos beneficios no redundan en el creador sino en el avispado intermediario.
La alusión a los ciberprofetas sólo la hace un sectarista conservador ajeno a la realidad y a que hasta el conserje se baja por la red infinita más música de la que consigue en el hiper, a que el compañero de despacho vió una serie norteamericana antes de que se comercializase y a que el chaval del tren no se queda hipnotizado por un cachivache sino que visuliza un video de un concierto en el que estuvo presente.
Algo para recordar, pulsar download y descargarse algo de la red no está ineludiblemente asociado a gratuidad. Otra más, gratuidad no está ineludiblemente asociado a ausencia de negocio. Otra más, mis monjitas tenían más sentido común.
Que alguien haga el favor de quitarle a Manrique el libro gordo de Petete y le facilite los consejos sobre música de un propagandista digital.

P.D. Otra tontería que se ha dicho de especial interés para evolucionistas, beatos y mis monjitas viene bien explicado por el PaleoFreak o el amigo Golem. También por Pere desde el MIT.

9 comentarios:

Manu, The Java Real Machine dijo...

Antiguamente, todos teníamos un radio-cd o una buena cadena de música para escuchar la música que nos comprábamos...

Estábamos acostumbrados a poner los vinilos, y te gustaban los CDs por la potencia del sonido con respecto al vinilo y su calidad...

Pero hoy en día, que la inmensa mayoría de la gente escucha la música en el reproductor de mp3, el coche (también con mp3) o el ordenador mientras trabaja (como hago yo)... el CD es más un incordio que otra cosa.

Sí, si eres muuuuy fan, te puede gustar tener el CD. Pero si no, prefiero tener la música en mp3, y me ahorro tener que pasar yo la música a mp3.

Y como muy bien dices, lo que realmente nos da fobia es pagar un sobrecoste por algo que no lo vale... así de claro.

Roke Iñaki Oruezabal dijo...

El CD está muerto, coleará como objeto de regalo durante un tiempo y de repente pasará a las estanterias de sórdidas tiendas de 3 por 1. Las cadenas de música tendrán wifi y disco duro para permitirte descargarte canciones, probablemente una pantalla o un bluetooth avanzado para conectarte a la tele y ver vídeos. Todo va a cambiar, y pronto.

Anónimo dijo...

Es obvio que tener en poco la opción de la Red es síntoma del desconocimiento. Punto y final.

Pero también del miedo. Pienso que es un recelo a lo intangible que se ha apoderado de muchos mayores.

Y es que los CDs… traen situaciones divertidas en los viajes con los padres. Decides salir a pasar el día con la famiia, cerquita de Madrid… a alguna provincia de las Castillas.

Tu padre va conduciendo y de pronto le dice a tu madre: CAMBIA DE CD. Creo que estaba por ahí el de Whitney Houston.

Buff!! Busca que te busca la dichosa cajita de plástico. Pero ahí está, la abres, coges el CD y… suena una de las muchas versiones de “VARIOS ----” que nos acompañan en diversas situaciones.

Bueno, estará en otra cajita (en la guantera, en la puerta). Y sigues probando CDs: la mayoría rayados, que si dan ERROR, etc.

Je je…porque no dejas éste, si no está mal, o el de varios. –dice alguien.

Fuera de bromas, la tecnología digital significa un avance, claro está que con muchos lados.

Lo que es indefendible es darle prioridad al CD con argumentos de simple apariencia y más si se traducen por calidad.

Dice mucho de la persona que prefriere o encuentra mejor algo en función de dónde viene. Vamos alucinante el argumento.

Aprovecho mi comentario para hablar también un poquito de los libros electrónicos (eBook). Los llaman ecolibros y es que es muy buena opción para el ahorro de papel.

Desde el año pasado los he comenzado a utilizar para hacer los trabajos de la uni, y es muy cómodo. Por ahora no encuentras todo lo que quieres pero ya sirven de ayuda.

Mucho mejor que llevarte una pila de libros a casa, hacer fotocopias, hacer reservas en la biblioteca porque el libro que quieres no está o es sólo de consulta interna…

Ojeas muchísima bibliografía de forma rápida ahorrando tiempo y recursos.

Un saludo, Blanca.

Reithor dijo...

Buenas, dos apuntes. Uno de psicosis, como no estando en USA algo de psicosis tengo que traer :D que es el asunto de la ley Sarkozy que quieren extender en Europa.

http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Cerco/descargas/Red/elpepisoc/20080112elpepisoc_1/Tes

Ahi queda eso.

El segundo apunte es que los reproductores mp3 y las minicadenas no tendrásn wifi y bluetooth, es que ya las tienen, y en más de una casa he visto chismes de esos (que son la caña). Hasta mi mp3 alternativo no-apple tiene bluetooth, y no era el más caro precisamente cuando lo compré...

Un saludo desde USA

Roke Iñaki Oruezabal dijo...

La referencia de Reithor ya es de órdago, en la SGAE son más listos que la leche, se impone un canon digital sin consenso ninguno con la presunción de que vas a copiar obras ajenas y no las fotos de tus vacaciones para luego decirte que también te van a regular los archivos que compartas, es de coña... Es como si te cobrasen por comprar un frigorífico porque cabe la posiblidad de que guardes peces pezqueñines (aunque seas vegetariano) para que luego encima te digan que van a regular que no se pueda comer pescado (pero ya todos los frigoríficos pagarán su canon)...
Por cierto, que los e-book, claro, también pagan canon (aunque lleves simplemente tus apuntes de clase)...acojonante...

Anónimo dijo...

El asunto del canon y el comportamiento de los partidos politicos en el Congreso ha demostrado como funciona a las claras nuestra Democracia y nuestros medios de comunicacion tradicionales asi como la enorme ignorancia de una ciudadania que se sabe impotente y que no le queda mas que pagar y el derecho a un breve pataleo.
Como con los contratos precarios, como con la vivienda etc etc
Quien conozca el fundamento de los derechos colectivos de los que nacen el canon de copia privada o el de comunicacion publica sabe que se concibieron para que las entidades de gestion y las grandes editoriales pudieran recaudar enormes cantidades y que no se hizo pensando ni en los autores ni en las pequeñas editoriales.
Los derechos colectivos de autor deberian eliminarse, no asi, los otros;el derecho de copia y distribucion por ejemplo que si pueden ser gestionados por los autores, por si mismos, sin entidades parasitas.

Anónimo dijo...

Lo que intenta defender el tío ese es su propio estatus creado a base de tragar mierda y pisar cabezas o esquivar balas durante las numerosas reconversiones de tve o radio nacional. Todos esos reciben toda clase de incentivos y parabienes de las multinacionales y el ente (copias gratis, viajes a sitios como Berlín, Londres, l.a. etc) y como es natural está defendiendo lo suyo al igual que defendería la presunta variedad nutritiva de una hamburguesa si estuviese de relaciones públicas de McDonalds.



Y lo de la comparación de lo que es tener un lp y un cd, una gilipollez. Un cd ni de coña alcanza ni la calidad ni ¨viste más¨ que un lp. Y encima la calidad que pueda tener no se nota a menos que gastes una cadena de más de 1000 euros con unos auriculares de 300. Lo curioso del asunto es que la electrónica de consumo cada vez es peor y si no comparad el sonido en una cadena Sharp o de cualquier marca ochentera del montón y una sony y me contaréis (tuve los 2 altavoces de una conectados a mi ordenata y mil veces mejor que unos creative actuales).

Anónimo dijo...

Que razón tienes...

Roke Iñaki Oruezabal dijo...

Pufff.. otro formato de disco de plástico muerto antes de eclosionar...el blue-ray. Más allá de que haya ganado la guerra contra el HD-DVD no se dan cuenta que lo del disquito de plástico sea el que sea está muerto...
Historia del blue-ray en http://www.xataka.com/2008/02/19-especial-hd-la-historia-del-blu-ray